Territoria apuesta por la zona cero. La compañía llegó a un acuerdo con Enel para adquirir el icónico edificio ubicado en Santa Rosa 76. A inicios de 2024 comenzarían las obras para levantar un complejo comercial, residencial y de oficinas y se proyecta construir un edificio aledaño hecho solo con madera, para que su construcción sea con huella de carbono negativa.
A partir del estallido social diversas empresas han dejado la comuna de Santiago para mudarse al sector oriente: Falabella se trasladó a Nueva Las Condes, BICE se cambió a Apoquindo, Transbank anunció su arribo a Isidora Goyenechea, y Banco Santander anunció una inversión de US$ 335 millones para construir su nuevo edificio en Américo Vespucio Norte con Av. Presidente Riesco.
Pero Territoria está nadando a contracorriente. La gestora inmobiliaria chilena -detrás del proyecto Mercado Urbano Tobalaba (MUT) en Las Condes- se está preparando para ejecutar un nuevo desarrollo de oficinas en Santa Rosa 76, a pasos del Metro Santa Lucía y en la denominada “zona cero”. Es de las pocas inmobiliarias que está llevando a cabo un plan de estas características en el centro de Santiago y con ese nivel de inversión: en total desembolsarán más de US$ 130 millones.
Específicamente, este nuevo desarrollo estará ubicado en el edificio de Enel, uno de los íconos del comienzo del estallido social: en la noche del 18 de octubre de 2019 este inmueble fue envuelto en llamas en medio de las protestas ciudadanas.
En concreto, Territoria, ligada al abogado Ignacio Salazar y al arquitecto Francisco Rencoret, adquirió este edificio -de 17 pisos- como parte del acuerdo para recibir a Enel en el MUT, uno de los proyectos inmobiliarios más ambiciosos en la capital: cuenta con cuatro torres que albergarán a más de 4 mil oficinistas. Además, tendrá 37 mil metros cuadrados de comercio y 21.000 de áreas verdes. Otras compañías que ya han anunciado su arribo a este complejo son Albemarle, Buk y Schneider Electric.
El nuevo proyecto en Santiago Centro todavía está en una etapa temprana: no tiene renders, nombre, ni una oficina de arquitectos o constructora elegida. No obstante, ya tienen listos los principales aspectos en papel.